Cada vez más familias eligen Alicante como su destino para veranear, y no es difícil entender por qué. Sus playas de arena dorada, su deliciosa gastronomía mediterránea, y, sobre todo, su clima cálido y soleado, convierten Alicante en un lugar perfecto para disfrutar de las vacaciones de verano.
Sin embargo, ir a Alicante de vacaciones y acabar en las playas más turísticas, especialmente en agosto, puede hacer que tus días de relax en la playa se conviertan en días de estrés.
Por qué, como todos sabemos, las playas de Alicante en verano se llenan de gente y sombrillas, por eso hoy te cuento cuáles son las 5 mejores playas para veranear en Alicante y disfrutar de una relajante día de playa.
1. Playa de la Almadraba
Si buscas un lugar tranquilo para disfrutar de un día de playa sin aglomeraciones, la Playa de la Almadraba es una excelente opción. Ubicada entre el Cabo de las Huertas y la Albufereta, esta pequeña playa de 750 metros de longitud es uno de los secretos mejor guardados de Alicante.
La Playa de la Almadraba se caracteriza por sus aguas tranquilas y su ambiente relajado. Es ideal para familias con niños pequeños que buscan disfrutar del mar sin el bullicio de las playas más grandes. Además, la poca profundidad de sus aguas hace que sea un lugar seguro para que los más pequeños jueguen sin preocupaciones.
Otro de los atractivos de la Playa de la Almadraba es su entorno natural. Rodeada de vegetación mediterránea y con vistas al Cabo de las Huertas, esta playa ofrece un paisaje pintoresco y la sensación de estar en un rincón apartado del mundo. Aquí, podrás relajarte bajo el sol, dar un paseo por la orilla o practicar deportes acuáticos como el paddle surf, sin tener que preocuparte por las multitudes.
2. Playa del Albir
Situada en la localidad de Albir, a unos 15 kilómetros de Alicante, la Playa del Albir es otro destino perfecto para quienes buscan escapar de las playas más concurridas. Esta playa, que se extiende a lo largo de 500 metros, se caracteriza por sus aguas cristalinas y su entorno natural, lo que la convierte en una de las mejores playas para veranear en Alicante.
Lo que distingue a la Playa del Albir de otras playas es su tranquilidad. A pesar de ser una playa popular entre los locales, no suele estar tan abarrotada como otras en la zona, lo que la hace ideal para aquellos que desean disfrutar de un día de sol y mar en un ambiente relajado. Además, su paseo marítimo, bordeado de palmeras y con vistas impresionantes al Parque Natural de la Sierra Helada, es el lugar perfecto para un paseo al atardecer.
El fondo marino de la Playa del Albir es otro de sus grandes atractivos. Conocido por su biodiversidad, es un lugar fantástico para practicar snorkel y explorar la vida marina. Las aguas claras permiten una visibilidad excelente, lo que hace que la experiencia sea aún más enriquecedora.
3. Cala Cantalar
Si eres amante de la naturaleza y prefieres playas más salvajes, la Cala Cantalar es una opción que no te puedes perder. Situada en el Cabo de las Huertas, a pocos kilómetros del centro de Alicante, esta cala es un lugar ideal para desconectar y disfrutar de la belleza natural de la costa alicantina.
La Cala Cantalar es una pequeña playa de roca y grava, rodeada de acantilados y vegetación mediterránea. Su acceso es algo más complicado que el de otras playas, lo que hace que sea menos frecuentada por los turistas. Esto, a su vez, garantiza una mayor tranquilidad y privacidad, lo que la convierte en un lugar perfecto para aquellos que buscan escapar del bullicio.
Este rincón del Cabo de las Huertas es especialmente popular entre los aficionados al snorkel y el buceo, ya que sus aguas cristalinas y su fondo rocoso ofrecen una experiencia submarina única. Podrás nadar entre bancos de peces y admirar la flora marina en un entorno casi virgen.
Aunque no encontrarás las comodidades de una playa urbana, como chiringuitos o hamacas, la Cala Cantalar ofrece una experiencia auténtica para aquellos que buscan algo diferente. Lleva contigo todo lo que necesites para el día y prepárate para disfrutar de una jornada de playa en plena naturaleza.
4. Playa del Carabassí
La Playa del Carabassí, situada en el municipio de Elche, es una de las playas más amplias y vírgenes de la Costa Blanca. Con sus 2 kilómetros de longitud, esta playa de arena fina y dorada ofrece un espacio inigualable para disfrutar del sol y el mar sin las aglomeraciones que se encuentran en otras playas más turísticas.
Una de las razones por las que la Playa del Carabassí es una de las mejores opciones para veranear en Alicante es su entorno natural. Esta playa se encuentra rodeada por un sistema de dunas y pinares que forman parte de un paraje natural protegido. Es un lugar perfecto para aquellos que aman la naturaleza y prefieren playas con un toque más salvaje y menos desarrollado.
A lo largo de la Playa del Carabassí, encontrarás áreas tanto para naturistas como para familias, lo que la convierte en una playa versátil que se adapta a diferentes tipos de visitantes. Además, gracias a su tamaño, siempre podrás encontrar un espacio tranquilo para extender tu toalla y disfrutar del día.
El mar en esta playa es ideal para practicar deportes acuáticos como el windsurf o el kitesurf, debido a las condiciones de viento que a menudo se dan en la zona. Si prefieres algo más relajado, un simple paseo por la orilla, rodeado de dunas y naturaleza, será suficiente para desconectar del estrés diario.
5. Cala de Finestrat
Mi favorita sin duda, la Cala de Finestrat, es un refugio de paz en medio de la bulliciosa Costa Blanca. Y aunque por su proximidad a Benidorm podría parecer lo contrario, esta pequeña cala ofrece un ambiente mucho más relajado y familiar, siendo una de las mejores playas para veranear en Alicante si buscas tranquilidad sin renunciar a las comodidades.
La Cala de Finestrat es una playa de arena fina y dorada, con aguas tranquilas y poco profundas, lo que la hace perfecta para familias con niños pequeños. Además, está rodeada de restaurantes, bares y tiendas, por lo que tendrás todo lo que necesitas a mano sin necesidad de alejarte demasiado de la playa. Y si lo prefieres, también puedes elegir un alquiler vacacional en la Cala de Finestrat, y disfrutar de verdad de tus vacaciones de relax en la Costa Blanca.
Una de las cosas que más me gustan de la Cala de Finestrat es su entorno pintoresco. Este pequeño pueblo pesquero ha sabido mantener su esencia, y a pesar del desarrollo turístico, todavía puedes disfrutar de un ambiente auténtico y acogedor. Pasear por las calles de Finestrat, con sus casas blancas y flores en los balcones, es una experiencia que complementa perfectamente un día de playa.
Además, la Cala de Finestrat ofrece una amplia gama de actividades acuáticas, desde alquilar un kayak hasta practicar paddle surf, lo que te permitirá disfrutar del mar de una manera más activa.
2 Tips Extras para Disfrutar de un Día de Playa en Alicante sin Estrés
1. Llega Temprano y Evita las Horas Punta
Una de las mejores maneras de evitar el estrés en la playa es llegar temprano. Las primeras horas de la mañana no solo son más frescas, sino que también son las menos concurridas. Podrás elegir el mejor lugar para colocar tu sombrilla y disfrutar de la playa con tranquilidad antes de que lleguen las multitudes.
Además, evita las horas punta, generalmente entre las 12:00 y las 16:00, cuando las playas suelen estar más llenas. Aprovecha esas horas para explorar el entorno, almorzar en un restaurante local o descansar a la sombra.
2. Lleva Todo lo Necesario Contigo
Para disfrutar de un día de playa sin estrés, asegúrate de llevar todo lo que puedas necesitar: protector solar, agua, snacks, una buena lectura, y por supuesto, sombrilla y toallas.
Al estar preparado, evitarás tener que interrumpir tu día de relax para buscar tiendas o servicios. Si viajas en familia, también es recomendable llevar juguetes para los niños, para que se entretengan mientras tú te relajas.
Veranea en Alicante
Veranear en Alicante puede ser tan relajante o estresante como tú elijas. Elegir playas menos turísticas, como la Playa de la Almadraba, la Playa del Albir, la Cala Cantalar, la Playa del Carabassí, o la Cala de Finestrat, te asegura un verano en la Costa Blanca lleno de sol, mar y tranquilidad.
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